Otra economía es posible


Carta Compromiso OTRA ECONOMIA ES POSIBLE

Propuesta para los participantes en el Encuentro hacia el Encuentro (Primer Encuentro de la Red Mexicana de Conciencia) por parte del ESPACIO DE ECONOMIA SOLIDARIA

Reunidos en la Universidad la Concordia en la ciudad de Aguascalientes, Ags. México, las y los firmantes queremos manifestar nuestro firme compromiso de trabajar más unidos por la creación de una economía justa y fraternal que supere la gran contradicción que hoy sufren grandes sectores excluidos de los satisfactores más elementales para llevar una vida digna. Nuestro Compromiso se basa en los principios de la ayuda mutua, la cooperación y la solidaridad, donde nadie quede excluido de las oportunidades de una vida mejor.

Hoy el mundo se encuentra dividido entre una gran masa de habitantes que carece de lo más indispensable y una minoría internacional que acapara privilegios que sólo el modelo neoliberal plantea como ideal: un modo de vida consumista, afanado por el poder de la ganancia y la concentración sin tomar en cuenta el respeto a las diversas culturas, a los recursos energéticos y naturales, y al medio ambiente en general. Nuestra economía ha estado volcada al exterior, está determinada estructuralmente por nuestra vecindad con los Estados Unidos y por la fuerza de las transnacionales.

Tenemos cifras gigantescas de empobrecimiento, desempleo, frustración y violencia en diversas formas, como resultado de esta brecha estructural. Las transnacionales, bancos internacionales y el sistema militar de EUA tienen más poder que una mayoría de los Estados agrupados en la Organización de las Naciones Unidas. Hemos vivido bajo el imperio basado en la ley del más fuerte, del más astuto y de lo más falso.

El modelo globalizador actual no es sostenible, destruye sociedad, cultura y medio ambiente. Estamos ya en medio de una intensa descomposición ante la cual precisamos reaccionar con energía no sólo mediante la protesta sino principalmente mediante la propuesta. Las instituciones que originalmente fueron creadas para servir a la sociedad necesitan hoy reformarse, reciclarse y recomponerse, como medios y no como fines, en todos los ámbitos, sea en la educación y la comunicación, la política y la economía, la cultura y la convivencia.

Frente a esto necesitamos crear una democracia participativa, una democracia plural que dé cabida y dinamismo a la gran diversidad de identidades y actores en una polifonía que supere a los voceros del poder.

Es hora de combinar la categoría de ciudadanía definida por la relación con el Estado, con la de consumidores, productores, servidores, innovadores, alternativos y los habitantes en general, categorías definidas por su relación con la Economía, la Cultura y el Planeta mismo.

Es preciso resaltar aquellos paradigmas que nos permitan cambios fundamentales en valores y jerarquías de intereses; sanas conductas personales y colectivas a favor de modos de vida digna y sostenible para todos. Necesitamos una mutación en toda la sociedad, generada desde sus bases más amplias sin exclusión de nadie y sin violencia que nos permita superar ese sistema capitalista que hoy ante la falta de contrapeso alguno se desboca y muestra ya sus más nefastos resultados.

Nuestra sociedad mexicana se compone de una gran diversidad de identidades, fuerzas y tendencias que están necesitando un urgente llamado convocatorio para converger en un nuevo modelo de sociedad donde predomine la solidaridad, el respeto y fomento de las más pequeñas expresiones vitales.

En México, organizaciones sociales, comunitarias, cooperativas, organismos civiles, hemos trabajado durante décadas en la promoción y fortalecimiento del pueblo organizado para alcanzar una vida más justa y fraterna. Hemos trabajado con autonomía respecto a los poderes económicos y políticos.

Las personas no se resignan y se esfuerzan por mantenerse económicamente activas, sea por el autoabasto mismo, la empresa familiar, la microempresa, hasta la asunción colectiva de empresas en crisis, la cogestión y la corresponsabilización con empresarios mayores, hay una infinidad de pobladores suburbanos, de mujeres, de jóvenes, de veteranos, que luchan inspirados en la mutualidad y el cooperativismo para encontrar soluciones propias y generalizables. Sin embargo, se carece de un sistema que de sentido y coherencia a esta emergencia del esfuerzo por la sobrevivencia, la resistencia y la altematividad por un mundo mejor.

Nos comprometemos a trabajar cotidianamente para componer este sistema con autonomía y en diálogo con toda instancia que comprenda que es urgente volver la vista hacia abajo y hacia adentro, y respaldar las mociones organizativas que provienen de nuestra gente más humilde y laboriosa.

Con este espíritu nos estamos organizando en cuatro ejes de trabajo:

1) Identidad, Conciencia y Educación, Ética y valores medulares:

En cuanto a la educación, proyectar la economía solidaria integrando actividades de organización, educación popular y movilización, generando entendimiento, sentimientos y prácticas solidarias, para actuar con ética en pro de la justicia en las relaciones personales, familiares, sociales y políticas, particularmente en la educación para el consumo e incidiendo sobre las políticas públicas.

En cuanto a la comunicación, realizar una amplia integración de nuestros vehículos de comunicación (boletines, radios comunitarias, internet y otros) para mapear y promover éticamente nuestros valores, organizaciones, productos y servicios solidarios.

2) Producción, comercialización y consumo organizados:

Organizando estrategias colectivas de venta, divulgando, compartiendo e intercambiando productos, integrando rutas de distribución y catálogos, facilitando la articulación de los productores entre sí y con los consumidores, atendiendo las necesidades de nuestras comunidades.

3) Finanzas, crédito, dinero convencional y alternativo:

Ampliando el volumen de intercambios a través de monedas sociales, construyendo redes de redes, estructurando planes de trabajo regionales con evaluación permanente y divulgando ampliamente nuestras acciones.

4) Sinergias en pro de una mesoeconomía integrando todos los sectores:
Reconociendo que las acciones económicas tienen impacto en el entorno local, regional y en la sociedad, se trata de orientarse hacia el bienestar del entorno físico y humano, propiciando la reciprocidad y compartiendo el compromiso con las generaciones futuras; posicionándose de manera intensiva y extensiva hacia un estadio superior de la economía y de la sociedad, remontando la marginalidad para abarcar los aspectos sociales, políticos y tecnológicos de la economía.

Igualmente nos estamos organizando definiendo regiones para una integración efectiva de producción, comercialización y consumo solidarios reorganizando las cadenas de producción en estrategias de red, favoreciendo la comunicación y el intercambio de valores productos y servicios.

Las redes conformamos un paso organizativo que supera las formas piramidales del centralismo o del descentralismo; crean el sentido horizontal y dan realce al trabajo local donde las identidades se conectan más fácilmente y contribuyen a recrear el tejido social a partir de las células productivas y de consumo más elementales.
Lo más importante es reconocer dónde y quién concreta el paradigma de la solidaridad mediante organizaciones efectivas, sean de productores, comercializadores y/o consumidores, sean células urbanas o rurales, sean productos o servicios, para contar con la riqueza potencial que las bases tienen para desarrollar un nuevo sistema de intercambio.

Frente a la economía capitalista que es simplista, que especializa, divide y explota, la economía solidaria es compleja, redimensiona, reintegra y enriquece. De ahí que todos somos solidariamente trabajadores y consumidores, aportamos a la red el fruto de nuestro trabajo y a la vez damos preferencia a los aportes de los demás componentes, consumiendo lo que en ella se produce. En un principio, la red es más de intercambio de información, pero progresivamente avanza en la integración de más productores y consumidores organizados, pudiendo producir productos y servicios, los suficientes para implementar una vida digna con el aporte de todos los miembros.

COMPROMISO.

Los abajo firmantes nos comprometemos para el año 2005 a fin de ir haciendo una realidad el lema "Otra Economía es Posible":

* Lograr que la economía solidaria, sea una condición de la dignidad de la persona humana, la calidad de vida, la solidaridad, el bien común y el respeto a los derechos humanos.
* Fortalecer las experiencias de economía solidaria, comercio justo, dinero solidario, trueque, cooperativismo, analizándolas y apoyando alianzas y redes a nivel local, nacional y regional que presenten una fuerza alternativa al comercio despiadado.
* Implementar estrategias de formación a los consumidores para que adquieran productos locales y de calidad elaborados por las organizaciones de los pequeños productores.
* Practicar y difundir una cultura de solidaridad, afirmando en nuestras acciones el valor ético de promover la dignidad humana en todas las dimensiones de nuestra vida.

Si queremos, podemos. Otro mundo es posible. Con el esfuerzo de todas y todos, lo construiremos.

Aguascalientes, Ags. a 26 de Junio de 2004.

Fuentes:
www.yahoogroups.com/group/economialternativa
http://redesdeluz.blogspot.com

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